Buenos días, hoy os voy a enseñar una receta muy fácil y deliciosa. El único inconveniente es que tendremos que contar con un día más para hacer la masa y dejarla reposar.

Los ingredientes que necesitaremos son básicos y económicos. Para la masa necesitaremos aceite de oliva virgen extra, harina, agua, sal y levadura. Para el relleno usaremos media cebolla, medio pimiento rojo, tomate frito, mozzarella, queso rallado, salsa barbacoa, carne picada, orégano y sal.

Comenzaremos haciendo la masa incorporando en un recipiente 400 gramos de harina, una pizca de sal, un sobre de levadura, 220cl de agua y un chorrito de aceite de oliva, lo amasaremos todo bien hasta que tengamos una masa totalmente homogénea y que no se pegue a los dedos. Una vez elaborada la conservamos en la nevera.

Sacaremos la masa de la nevera 10 minutos antes para que temple. Cuando esté, la estiramos en la meseta de la cocina con la ayuda de un rodillo (espolvorearemos harina para que no se pegue) y la ponemos en la bandeja del horno.

Una vez que esté, procedemos a preparar el relleno. Para ello picamos la cebolla y el pimiento en juliana, y lo ponemos a pochar. Cuando esté casi listo, añadimos la carne y aderezamos al gusto.

Comenzaremos entonces a montar la pizza, primero con una capa de salsa de tomate que cubriremos con la mozzarella. Echamos la carne con los vegetales por encima y luego un poco de salsa barbacoa al gusto. Espolvoreamos el queso rallado y el orégano. Estaría ya lista para meter al horno, unos 15 minutos a 180 grados, (en la parte baja del horno para que se haga bien la masa).

Cuando dore el queso ya estaría. ¡Espero que os guste!