Hoy os propongo una receta sencilla y que está para chuparse los dedos.
Para ello necesitamos:
4 patatas grandes.
1 cebolla.
Perejil picado.
50 ml vino blanco.
750 ml caldo de carne.
Harina.
2 huevos.
Comenzamos pelando y cortando la cebolla fina. En una pota, la ponemos a pochar con un chorrito de aceite de oliva, a fuego lento. Seguidamente introducimos el perejil picado y el vino blanco, esperamos que hierva unos minutos y añadimos el caldo de carne. Dejamos que se cocine a fuego lento unos 10 minutos.
Por otro lado pelamos las patatas, las cortamos en rodajas, las pasamos por harina y huevo y las freímos en abundante aceite.
Una vez fritas, las añadimos al caldo y las dejamos cocer a fuego lento hasta que estén blanditas y hechas.
¡Espero que os guste! 😛
